Maroto de Guzmán, Luis

Pintor ceramista que trabajó en Sevilla de la primera mitad del siglo XX. Nace circunstancialmente en Brenes (Sevilla) en el año 1885 o 1886, aunque la vivienda familiar estaba en el barrio de San Lorenzo, siendo hijo único. Estudió en los jesuitas del Puerto de Santa María (Cádiz).

Sus comienzos en la cerámica los encontramos en la Fábrica de Manuel Corbato, donde acude para sacar unos ingresos con los que costearse los estudios artísticos. Allí se especializó en montería y en la ejecución de retablos cerámicos. A ésta época pertenece uno de sus mejores obras, la Virgen del Pozo Santo que se localiza en la residencia de la calle Misericordia de Sevilla, que data de 1916.

Los estudios artísticos los efectúa, según entresacamos de su expediente académico, entre los años 1902 a 1912 en la Escuela  Superior de Artes e Industrias y Bellas Artes de Sevilla, apareciendo su certificación académica personal firmada en seis de agosto de 1912 por el director Vicente Pitaluga y el secretario Virgilio Mattoni de la Fuente. Tuvo como profesor a José Gestoso y Pérez.

Una segunda etapa es en Casa González, donde entabla relación con el arquitecto Aníbal González Álvarez-Ossorio. Participó en numerosos trabajos en cerámica ejecutados para la Exposición Iberoamericana de 1929. En Casa González ejecuta muchas obras para Sudamérica, especialmente Argentina.

Tuvo un taller en la Casa de los Artistas de San Juan de la Palma, donde también estaba Grosso, y tenía alumnos, como aparece en la foto que nos facilita su hija Carmen.

También colaboró en Ramos Rejano en tiempos de Vigil-Escalera, pero por poco tiempo. No firmaba muchas de las obras.

Tras la guerra civil, ante la escasez de trabajo, se colocó como gerente del almacén de construcción de Rafael Távora, en las calles Febo y Ardilla, en Triana, y paralelamente comienza a trabajar para cerámica Montalván, ya que don Ignacio Gómez Millán, que llevaba su dirección artística, era amigo de Rafael Távora, su cuñado.  En Montalván estuvo hasta su jubilación.

Pintó algunos óleos, pero los perdió en unas lluvias torrenciales que cayeron en Valencina de la Concepción, donde los guardaba.

Fue gran amante de Sevilla y de su arte cerámico, ya que teniendo la carrera de Bellas Artes y obtenida plaza de profesor en Las Palmas de Gran Canaria, renunció a ella para dedicarse a la cerámica.

Casó con Josefa Távora de los Reyes, siéndole presentada por el arquitecto Aníbal González, contrayendo matrimonio el 12 de abril de 1930 en la parroquia de San Lorenzo,  estableciendo su vivienda en la vivienda familiar de Luis en el barrio de San Lorenzo, ya los padres de ambos habían fallecido. Tuvieron dos hijos, Carmen y José Luis.

Falleció el 3 de enero de 1969, siendo oficiado su funeral en la iglesia parroquial de San Gonzalo, por residir entonces en la cerca calle de Alvar Núñez.

Fuentes:

  1. Entrevista de Martín Carlos Palomo García con su hija Carmen Maroto Távora, en septiembre de 2014.
  2. Hemeroteca del Diario ABC. Sección Casco Antiguo, 10 de agosto de 1982, y noticia de su sepelio en ABC 11 de enero de 1969.

Fotografías: Archivo familiar (facilitada por su hija Carmen Maroto Távora a Martín Carlos Palomo García)

Talleres

  • Manuel Corbato García. Fábrica desde primera época (segunda década del siglo XX aproximadamente)
  • Casa González. Fábrica. (Sevilla) desde en torno a la década de 1920
  • Ramos Rejano, Fábrica desde en torno a la década de 1930
  • Montalván. Fábrica desde la década de 1940 hasta su jubilación