Emilio José Sánchez Palacios nace en Sevilla el 2 de octubre de 1967. Hijo del ceramista Juan Sánchez Cueto, su maestro en la técnica de la cerámica, y ahijado de otro ceramista, José León Rodríguez, compañero de su padre en Cerámica Santa Ana. Dotado desde su infancia de unas grandes cualidades para el dibujo, colaboró en su primera juventud en revistas de comics. Comienza a trabajar con su padre y hermano en el taller familiar de Cerámica Macarena, en 1986, en la calle Manuel Villalobos de la capital hispalense, firmando como «Emi» o como “Emilio Palacios” a principios de los noventa. También realizaron encargos para Cerámica Santa Ana.
En 1993 se matriculó en la Facultad de Bellas Artes de Sevilla, acabando su licenciatura en 1998, conservando la ilusión de poder ejercer como pintor y plasmar todo su arte en los lienzos. Pero la realidad se impuso y ante la falta de oportunidades casi toda su producción artística se ha basado en los retablos cerámicos, estando considerado como uno de los mejores ceramistas desde finales del siglo XX, por la perfección alcanzada en sus trabajos, dentro del estilo tradicional de los azulejos sevillanos.
Trasladado el taller en el año 2000 a la calle José María Izquierdo, en el que seguía trabajando con su hermano Juan y con la colaboración cada vez más esporádica de su padre, el primero abandonó la pintura cerámica en 2003, tras aprobar las oposiciones de enseñanza secundaria, y su padre falleció el 19 de diciembre de 2008. Tras cerrarlo en el año 2015, compartió taller con el pintor ceramista Emilio Heredia desde enero de 2016, que estaba establecido en la barriada de Torreblanca, firmando algunas obras en conjunto.
Esta etapa fue de corta duración pues en el curso 2016-2017, tras aprobar las oposiciones a enseñanza secundaria, abandona la pintura cerámica y se dedica a la docencia, siendo sus primeros destinos en tierras extremeñas. Emilio manifestaba estar muy desencantado de la cerámica, por la cantidad de horas que dedicaba a pintar un retablo cerámico y la escasa rentabilidad económica.
Fuente: entrevista personal con el ceramista, a cargo de Martín Carlos Palomo García, ceramófilo de Sevilla.
Fotografías: Martín Carlos Palomo García