Este retrato, junto con el de la reina Victoria Eugenia, presidió el salón de exposición de la desaparecida fábrica de Mensaque, Rodríguez y Cía., cuyas instalaciones estaban sitas en Triana, en la calle Evangelista 47. Tras la demolición del edificio en 1975, los retratos fueron trasladados a una tienda exposición de la firma que mantuvo en la calle Constancia 38 (1975-1992), y de aquí a las nuevas instalaciones en Santiponce, hasta el año 2006 en que definitivamente cesa su producción la empresa, no sin antes presidir en 1992 el stand que la Fábrica tuvo en la Exposición Universal de Sevilla celebrada en la Isla de la Cartuja (Martín Carlos Palomo García).