Bibliografía

MARTÍNEZ CAVIRÓ, Balbina. Summa Artis. Cerámica Española. La cerámica Hispanomusulmana. Madrid 1997.

Más datos

La cerámica al servicio de la decoración arquitectónica, que tanta importancia alcanzará en tiempos nazaríes, parece que se inició tímidamente durante el califato, concretamente en el reinado de Al-Hakam II (961-976), si nos atenemos a la única obra conservada, la imposta de la bóveda de la maxura de la mezquita de Córdoba. Consta esta de una sucesión de azulejos en semibocel, decorados con imbricaciones pintadas con la mejor técnica cerámica fabricada a la sazón en los hornos cordobeses, la que conocemos con el nombre de cerámica verde y manganeso. Tal técnica, muy empleada en las piezas de vajilla, consiste en recubrir con una engalba blanca las labores previamente juagueteadas, sobre la cual se aplica la decoración con óxido de manganeso y óxido de cobre. Una vez seca esta, se procede a la aplicación del óxido de plomo que, en una segunda cochura, se torna en una capa vítrea brillante y transparente que permite ver el dibujo realizado en negruzco y verde con los citados óxidos.
Aunque no conocemos más que este ejemplo de cerámica arquitectónica califal, es posible que se realizaran algunas otras obras, si bien no tenemos constancia de ellas.

Conjunto

Córdoba. Mezquita-Catedral