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El retablo es de una gran calidad y podría atribuirse al mismo taller que pintó la Inmaculada con monjas mercedarias conservada en el Museo de Bellas Artes de Sevilla (VER) Sin duda, ambos y otros más que podrían incluirse como obras del mismo taller, debieron ser realizados por uno de los pintores más cualificados del comienzos del siglo XVIII, todavía anónimo.

La figura de la Virgen llena todo el espacio con unos pequeños querubines volando por el cielo dorado. La Virgen mira hacia su derecha y hacia abajo y las manos unidas hacia la izquierda. Apoya sus pies sobre el orbe, rodeado por la serpiente con la manzana en la boca, símbolo del pecado. Completa la composición un personaje masculino de forma orante, en el ángulo inferior izquierdo, que dirige su mirada al de la Virgen y exclama desde su boca la siguiente frase: «Tota Pulcra es María». Rodeando de manera oval esta escena aparece la siguiente leyenda: «Alabemos todos con grande atención, el misterio puro de la Concepción».

Las piezas 14 y 15 se encuentran mal colocadas. A continuación ofrecemos la versión correcta y en segundo lugar tal y como se encuentra en la actualidad.

Leyenda que contiene la obra

Alabemos todos con grande atension, el misterio puro de la Consepcion

Conjunto

Carmona. Convento de Santa Clara