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La imagen de San Cristóbal se encuentra en las dependencias de una corrala de la calle Corredera de Lebrija, del siglo XVIII, en la zona correspondiente al lavadero/cocina. Por las características de la decoración vegetal que rodea a la figura central podemos encontrar similitudes con otros trabajos en la misma localidad y del resto de la provincia, variando la calidad del dibujo y la aplicación de los colores, generalmente manganeso, pardos/anaranjados, azules y amarillos. Las manchas de cal impiden ver la decoración completa. La escena es muy infantil y representa a San Cristóbal transportando a hombros al Niño Jesús, destacándose su enorme corpulencia.