Bibliografía

Palomo García, Martín Carlos. (2009). La Resurrección. Boletín de las Cofradías de Sevilla núm. 610, diciembre 2009, pp. 935-937. (VER)

Más datos

Su colocación fue promovida por la Hermandad de la Resurrección, que reside en el templo de Santa Marina. Se trata de una de las obras más notables del taller Barro-co, en cuya ejecución participaron los tres componentes del mismo: Juan Manuel Herrera Suárez, Rocío Almarcha Pardo y María Luisa Gómez Polaina. Cada estación está compuesta por una sola pieza en forma de arco ojival, en consonancia con el estilo de la iglesia, bordeado por unas arquivoltas silueteadas en azul sobre blanco, los colores de la Hermandad. Se tomó como base el Vía Crucis de la capilla de la Universidad, colocado por la Hermandad de los Estudiantes en 1999, al cumplir su LXXV aniversario fundacional. Al igual que éste, se compone de quince estaciones, en vez de las catorce tradicionales. Aunque hay diversas fuentes que indican que la primera vez que S. S. Juan Pablo II introduce la XV Estación, Jesús ha resucitado, en el Vía Crucis celebrado en el Coliseo de Roma en 1993, parece más correcto reseñar que S.S. creó en 1991 para su rezo en el Coliseo, un nuevo Vía Crucis cuyas estaciones se basan en los Evangelios, no en la tradición, y que son estas nuevas estaciones de Juan Pablo II, y no las tradicionales, las que se escogen para el Vía Crucis cerámico de Santa Marina.

Las escenas representadas reproducen diferentes misterios extraídos de la iconografía de cofradías sevillanas, de forma que se buscó entre los hermanos de la Resurrección a aquellos que además estuviesen vinculados a dichas hermandades, constituyéndose aquellos en donantes de cada estación; sus nombres figuran en el reverso de cada placa cerámica. Su bendición tuvo lugar el 19 de octubre de 2007, por el Rvdo. P. Florentino Córcoles Calero, que ofició la función solemne del aniversario fundacional, fecha que tiene un simbolismo especial para esta Hermandad pues en ese mismo día de 1969 tendría lugar su constitución.

La iconografía representada está basada en los titulares de quince cofradías sevillanas, bien de imágenes individuales como de misterios de la Pasión, siendo las siguientes:

I. Jesús en el Huerto de los Olivos. Nuestro Padre Jesús de la Oración en el Huerto, de la Hermandad de Montesión.

II. Jesús traicionado por Judas y arrestado. Nuestro Padre Jesús de la Redención en el Beso de Judas.

III. Jesús es condenado por el Sanedrín. Nuestro Padre Jesús del Soberano Poder ante Caifás, de la Hermandad de San Gonzalo.

IV. Jesús es negado por Pedro. Nuestro Padre Jesús de la Paz, de la Hermandad de Nuestra Señora del Carmen Dolorosa.

V. Jesús es juzgado por Pilato. Nuestro Padre Jesús de la Sentencia, de la Hermandad de La Macarena

VI. Jesús es flagelado y coronado de espinas. Nuestro Padre Jesús de la Salud y Buen Viaje, de la Hermandad de San Esteban

VII. Jesús carga con la Cruz. Nuestro Padre Jesús de la Pasión.

VIII. Jesús es ayudado por el Cirineo a llevar la Cruz. Nuestro Padre Jesús de las Penas, de la Hermandad de San Roque.

IX. Jesús encuentra a las mujeres. Jesús con la Cruz a cuestas por la calle de la Amargura, de la Hermandad del Valle.

X. Jesús es crucificado. Santísimo Cristo de la Exaltación.

XI. Jesús promete su Reino al Buen Ladrón. Santísimo Cristo de la Conversión, de la Hermandad de Montserrat.

XII. Jesús Crucificado, la Madre y el Discípulo. Santísimo Cristo de las Siete Palabras.

XIII. Jesús muere en la Cruz. Santísimo Cristo de las Almas, de la Hermandad de los Javieres.

XIV. Jesús es depositado en el Sepulcro. Santísimo Cristo de la Caridad en su traslado al sepulcro, de la Hermandad de Santa Marta.

XV. ¡El Señor ha resucitado! Hermandad de la Sagrada Resurrección.

Conjunto

Sevilla. Iglesia de Santa Marina