Más datos

Aunque la pieza no contenga firma de autor ni fábrica, es evidente que pertenece al periodo en el que, bajo la influencia directa de José Gestoso, algunos talleres sevillanos recuperaron la técnica de la cuerda seca, con notorio éxito en muchas de las piezas elaboradas.

Existen varios retablos con la representación de la Virgen y el Niño que, si bien contienen algunas diferencias, todas ellas parecen seguir un modelo común que pudiera ser el ejecutado por José Gestoso en 1897 conservado en un domicilio particular de la calle Santa Teresa en Sevilla. La obra parece ser un trasunto de la Virgen de la Antigua de la Catedral sevillana aunque pasada por el filtro medievalizante, muy del gusto de Gestoso. Un modelo que tuvo éxito y que es posible que otros pintores, siguiendo este primitivo modelo, replicaran en otras obras.