Taller de cerámica establecido en Sevilla por Cristóbal de Augusta, autor que se sitúa entre los mayores artífices de la azulejería del siglo XVI, con un elenco de obras fechadas desde la década de 1570 hasta 1599.
Gestoso sería su gran descubridor y el primero en citarlo en su magnífica obra “Historia de los barros vidriados sevillanos desde sus orígenes hasta nuestros días (Sevilla 1903)”, tras detenido estudio en los archivos del Alcázar, allá por el año de 1888.
En documento de fecha 11 de enero de 1569 figura como “pintor de azulejo de la obra de Italia”, teniendo su domicilio en Triana. Con posterioridad residiría en la feligresía de Omnium Sanctorum, volvería a Triana y más tarde se instalaría en el barrio de San Vicente.
Muchas de sus obras están firmadas, pero otras están atribuidas, por lo que se deduce que la ingente producción de azulejos debió acometerla con la colaboración de otros operarios de su taller.
Obras atribuidas:
Zócalos de la iglesia de Santiago en Carmona (1577)
Zócalos en el palacio de la condesa de Lebrija (1585), procedentes del convento de San Agustín
Zócalos del convento Madre de Dios de Sevilla.
Altar lateral de San Agustín en el monasterio de Tentudía.
Altar lateral de Santiago en el monasterio de Tentudía.
Zócalos del monasterio de San Clemente. (1588)
Mesa de altar del museo Boymans de Rotterdam. (1576)
Obras desaparecidas:
Vía Crucis para el Monasterio de San Francisco (Desaparecido). (1585)
Panel con la Resurrección igual al existente en el Instituto Valencia de Don Juan de Madrid.
Biografía de Cristóbal de Augusta (VER)